- 
			
				
Leer por capítulos:
22- 
									
   Biblia Dios Habla Hoy									 - 
									
									 
- 
										SALMO 22 (21)
Grito de angustia y canto de alabanza
Del maestro de coro, según la melodía de «La cierva de la aurora». Salmo de David. 
- 
									
									1
									 
									 
									|Salmos 22:1|
									Dios mío, Dios mío, 
¿por qué me has abandonado?,
¿por qué no vienes a salvarme?,
¿por qué no atiendes a mis lamentos?
									    
								 
- 
									
									2
									 
									 
									|Salmos 22:2|
									Dios mío, 
día y noche te llamo, y no respondes;
¡no hay descanso para mí!
									    
								 
- 
									
									3
									 
									 
									|Salmos 22:3|
									Pero tú eres santo; 
tú reinas, alabado por Israel.
									    
								 
- 
									
									4
									 
									 
									|Salmos 22:4|
									Nuestros padres confiaron en ti; 
confiaron, y tú los libertaste;
									    
								 
- 
									
									5
									 
									 
									|Salmos 22:5|
									te pidieron ayuda, y les diste libertad; 
confiaron en ti, y no los defraudaste.
									    
								 
- 
									
									6
									 
									 
									|Salmos 22:6|
									Pero yo no soy un hombre, sino un gusano; 
¡soy el hazmerreír de la gente!
									    
								 
- 
									
									7
									 
									 
									|Salmos 22:7|
									Los que me ven, se burlan de mí; 
me hacen muecas, mueven la cabeza
									    
								 
- 
									
									8
									 
									 
									|Salmos 22:8|
									y dicen: 
«Éste confiaba en el Señor;
pues que el Señor lo libre.
Ya que tanto lo quiere, que lo salve.»
									    
								 
- 
									
									9
									 
									 
									|Salmos 22:9|
									Y así es: 
tú me hiciste nacer del vientre de mi madre;
en su pecho me hiciste descansar.
									    
								 
- 
									
									10
									 
									 
									|Salmos 22:10|
									Desde antes que yo naciera, 
fui puesto bajo tu cuidado;
desde el vientre de mi madre,
mi Dios eres tú.
									    
								 
 - 
									
 - 
				
Sugerencias
 

Haga clic para leer Juan 16-18