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Reina Valera (1909) -
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25
|Hechos 2:25|
Porque David dice de él: Veía al Señor siempre delante de mí: Porque está á mi diestra, no seré conmovido.
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26
|Hechos 2:26|
Por lo cual mi corazón se alegró, y gozóse mi lengua; Y aun mi carne descansará en esperanza;
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27
|Hechos 2:27|
Que no dejarás mi alma en el infierno, Ni darás á tu Santo que vea corrupción.
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28
|Hechos 2:28|
Hicísteme notorios los caminos de la vida; Me henchirás de gozo con tu presencia.
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29
|Hechos 2:29|
Varones hermanos, se os puede libremente decir del patriarca David, que murió, y fué sepultado, y su sepulcro está con nosotros hasta del día de hoy.
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30
|Hechos 2:30|
Empero siendo profeta, y sabiendo que con juramento le había Dios jurado que del fruto de su lomo, cuanto á la carne, levantaría al Cristo que se sentaría sobre su trono;
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31
|Hechos 2:31|
Viéndolo antes, habló de la resurrección de Cristo, que su alma no fué dejada en el infierno, ni su carne vió corrupción.
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32
|Hechos 2:32|
A este Jesús resucitó Dios, de lo cual todos nosotros somos testigos.
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33
|Hechos 2:33|
Así que, levantado por la diestra de Dios, y recibiendo del Padre la promesa del Espíritu Santo, ha derramado esto que vosotros veis y oís.
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34
|Hechos 2:34|
Porque David no subió á los cielos; empero él dice: Dijo el Señor á mi Señor: Siéntate á mi diestra,
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Sugerencias
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