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Reina Valera (1909) -
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31
|Marcos 1:31|
Entonces llegando él, la tomó de su mano y la levantó; y luego la dejó la calentura, y les servía.
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32
|Marcos 1:32|
Y cuando fué la tarde, luego que el sol se puso, traían á él todos los que tenían mal, y endemoniados;
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33
|Marcos 1:33|
Y toda la ciudad se juntó á la puerta.
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34
|Marcos 1:34|
Y sanó á muchos que estaban enfermos de diversas enfermedades, y echó fuera muchos demonios; y no dejaba decir á los demonios que le conocían.
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35
|Marcos 1:35|
Y levantándose muy de mañana, aun muy de noche, salió y se fué á un lugar desierto, y allí oraba.
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36
|Marcos 1:36|
Y le siguió Simón, y los que estaban con él;
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37
|Marcos 1:37|
Y hallándole, le dicen: Todos te buscan.
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38
|Marcos 1:38|
Y les dice: Vamos á los lugares vecinos, para que predique también allí; porque para esto he venido.
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39
|Marcos 1:39|
Y predicaba en las sinagogas de ellos en toda Galilea, y echaba fuera los demonios.
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40
|Marcos 1:40|
Y un leproso vino á él, rogándole; é hincada la rodilla, le dice: Si quieres, puedes limpiarme.
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Sugerencias
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