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   Reina Valera (1909)									 - 
									
									 
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									51
									 
									 
									|Mateo 26:51|
									Y he aquí, uno de los que estaban con Jesús, extendiendo la mano, sacó su espada, é hiriendo á un siervo del pontífice, le quitó la oreja.
									
									    
								 
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									52
									 
									 
									|Mateo 26:52|
									Entonces Jesús le dice: Vuelve tu espada á su lugar; porque todos los que tomaren espada, á espada perecerán.
									
									    
								 
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									53
									 
									 
									|Mateo 26:53|
									¿Acaso piensas que no puedo ahora orar á mi Padre, y él me daría más de doce legiones de ángeles?
									
									    
								 
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									54
									 
									 
									|Mateo 26:54|
									¿Cómo, pues, se cumplirían las Escrituras, que así conviene que sea hecho?
									
									    
								 
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									55
									 
									 
									|Mateo 26:55|
									En aquella hora dijo Jesús á las gentes: ¿Como á ladrón habéis salido con espadas y con palos á prenderme? Cada día me sentaba con vosotros enseñando en el templo, y no me prendisteis.
									
									    
								 
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									56
									 
									 
									|Mateo 26:56|
									Mas todo esto se hace, para que se cumplan las Escrituras de los profetas. Entonces todos los discípulos huyeron, dejándole.
									
									    
								 
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									57
									 
									 
									|Mateo 26:57|
									Y ellos, prendido Jesús, le llevaron á Caifás pontífice, donde los escribas y los ancianos estaban juntos.
									
									    
								 
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									58
									 
									 
									|Mateo 26:58|
									Mas Pedro le seguía de lejos hasta el patio del pontífice; y entrando dentro, estábase sentado con los criados, para ver el fin.
									
									    
								 
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									59
									 
									 
									|Mateo 26:59|
									Y los príncipes de los sacerdotes, y los ancianos, y todo el consejo, buscaban falso testimonio contra Jesús, para entregale á la muerte;
									
									    
								 
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									60
									 
									 
									|Mateo 26:60|
									Y no lo hallaron, aunque muchos testigos falsos se llegaban; mas á la postre vinieron dos testigos falsos,
									
									    
								 
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Sugerencias
 

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