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Reina Valera (1960) -
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|Romanos 2:1|
Por lo cual eres inexcusable, oh hombre, quienquiera que seas tú que juzgas; pues en lo que juzgas a otro, te condenas a ti mismo; porque tú que juzgas haces lo mismo.
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2
|Romanos 2:2|
Mas sabemos que el juicio de Dios contra los que practican tales cosas es según verdad.
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3
|Romanos 2:3|
¿Y piensas esto, oh hombre, tú que juzgas a los que tal hacen, y haces lo mismo, que tú escaparás del juicio de Dios?
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4
|Romanos 2:4|
¿O menosprecias las riquezas de su benignidad, paciencia y longanimidad, ignorando que su benignidad te guía al arrepentimiento?
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5
|Romanos 2:5|
Pero por tu dureza y por tu corazón no arrepentido, atesoras para ti mismo ira para el día de la ira y de la revelación del justo juicio de Dios,
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6
|Romanos 2:6|
el cual pagará a cada uno conforme a sus obras:
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7
|Romanos 2:7|
vida eterna a los que, perseverando en bien hacer, buscan gloria y honra e inmortalidad,
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8
|Romanos 2:8|
pero ira y enojo a los que son contenciosos y no obedecen a la verdad, sino que obedecen a la injusticia;
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9
|Romanos 2:9|
tribulación y angustia sobre todo ser humano que hace lo malo, el judío primeramente y también el griego,
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10
|Romanos 2:10|
pero gloria y honra y paz a todo el que hace lo bueno, al judío primeramente y también al griego;
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Sugerencias
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