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									 Sagradas Escrituras (1569) Sagradas Escrituras (1569)
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									33
									 
									 
									|Lucas 9:33|
									Y aconteció, que apartándose ellos de él, Pedro dice a Jesús: Maestro, bien es que nos quedemos aquí; y hagamos tres tabernáculos: uno para ti, y uno para Moisés, y uno para Elías; no sabiendo lo que decía.
									
     
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									34
									 
									 
									|Lucas 9:34|
									Y estando él hablando esto, vino una nube que los cubrió; y tuvieron temor entrando ellos  en la nube.
									
     
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									35
									 
									 
									|Lucas 9:35|
									Y vino una voz de la nube, que decía: Este es mi Hijo amado; a El oíd.
									
     
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									36
									 
									 
									|Lucas 9:36|
									Y pasada aquella voz, Jesús fue hallado solo; y ellos callaron, y por aquellos días no dijeron nada a nadie de lo que habían visto.
									
     
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									37
									 
									 
									|Lucas 9:37|
									Y aconteció al día siguiente, apartándose ellos del monte, gran multitud les salió al encuentro.
									
     
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									38
									 
									 
									|Lucas 9:38|
									Y he aquí, un hombre de la multitud clamó, diciendo: Maestro, te ruego que veas a mi hijo; que es el único que tengo;
									
     
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									39
									 
									 
									|Lucas 9:39|
									y he aquí un espíritu lo toma, y de repente da voces; y le despedaza y hace echar espuma, y apenas se aparta de él quebrantándole.
									
     
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									40
									 
									 
									|Lucas 9:40|
									Y rogué a tus discípulos que le echasen fuera, y no pudieron.
									
     
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									41
									 
									 
									|Lucas 9:41|
									Y respondiendo Jesús, dice: ¡Oh generación infiel y perversa! ¿Hasta cuándo tengo que estar con vosotros, y os sufriré? Trae tu hijo acá.
									
     
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									42
									 
									 
									|Lucas 9:42|
									Y mientras se acercaba, el demonio le derribó y despedazó; pero Jesús increpó al espíritu inmundo, y sanó al muchacho, y se lo volvió a su padre.
									
     
 
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