- 
			
				
- 
									
   Reina Valera (1960)									 - 
									
									 
- 
									
									1
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:1|
									Porque vosotros mismos sabéis, hermanos, que nuestra visita a vosotros no resultó vana;									
									    
								 
- 
									
									2
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:2|
									pues habiendo antes padecido y sido ultrajados en Filipos, como sabéis, tuvimos denuedo en nuestro Dios para anunciaros el evangelio de Dios en medio de gran oposición.									
									    
								 
- 
									
									3
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:3|
									Porque nuestra exhortación no procedió de error ni de impureza, ni fue por engaño,									
									    
								 
- 
									
									4
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:4|
									sino que según fuimos aprobados por Dios para que se nos confiase el evangelio, así hablamos; no como para agradar a los hombres, sino a Dios, que prueba nuestros corazones.									
									    
								 
- 
									
									5
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:5|
									Porque nunca usamos de palabras lisonjeras, como sabéis, ni encubrimos avaricia; Dios es testigo;									
									    
								 
- 
									
									6
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:6|
									ni buscamos gloria de los hombres; ni de vosotros, ni de otros, aunque podíamos seros carga como apóstoles de Cristo.									
									    
								 
- 
									
									7
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:7|
									Antes fuimos tiernos entre vosotros, como la nodriza que cuida con ternura a sus propios hijos.									
									    
								 
- 
									
									8
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:8|
									Tan grande es nuestro afecto por vosotros, que hubiéramos querido entregaros no sólo el evangelio de Dios, sino también nuestras propias vidas; porque habéis llegado a sernos muy queridos.									
									    
								 
- 
									
									9
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:9|
									Porque os acordáis, hermanos, de nuestro trabajo y fatiga; cómo trabajando de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros, os predicamos el evangelio de Dios.									
									    
								 
- 
									
									10
									 
									 
									|1 Tesalonicenses 2:10|
									Vosotros sois testigos, y Dios también, de cuán santa, justa e irreprensiblemente nos comportamos con vosotros los creyentes;									
									    
								 
 - 
									
 - 
				
Sugerencias
 

Haga clic para leer Juan 14-15