-
Leia por capítulosComentário sobre a Leitura Bíblica de Hoje
-
Reina Valera (1909)
-
-
30
|2 Reis 6:30|
Y como el rey oyó las palabras de aquella mujer, rasgó sus vestidos, y pasó así por el muro: y llegó á ver el pueblo el saco que traía interiormente sobre su carne.
-
31
|2 Reis 6:31|
Y él dijo: Así me haga Dios, y así me añada, si la cabeza de Eliseo hijo de Saphat quedare sobre él hoy.
-
32
|2 Reis 6:32|
Estaba á la sazón Eliseo sentado en su casa, y con él estaban sentados los ancianos: y el rey envió á él un hombre. Mas antes que el mensajero viniese á él, dijo él á los ancianos: ¿No habéis visto como este hijo del homicida me envía á quitar la cabeza? Mirad pues, y cuando viniere el mensajero, cerrad la puerta, é impedidle la entrada: ¿no viene tras él el ruido de los pies de su amo?
-
33
|2 Reis 6:33|
Aun estaba él hablando con ellos, y he aquí el mensajero que descendía á él; y dijo: Ciertamente este mal de Jehová viene. ¿Para qué tengo de esperar más á Jehová?
-
1
|2 Reis 7:1|
DIJO entonces Eliseo: Oid palabra de Jehová: Así dijo Jehová: Mañana á estas horas valdrá el seah de flor de harina un siclo, y dos seah de cebada un siclo, á la puerta de Samaria.
-
2
|2 Reis 7:2|
Y un príncipe sobre cuya mano el rey se apoyaba, respondió al varón de Dios, y dijo: Si Jehová hiciese ahora ventanas en el cielo, ¿sería esto así? Y él dijo: He aquí tú lo verás con tus ojos, mas no comerás de ello.
-
3
|2 Reis 7:3|
Y había cuatro hombres leprosos á la entrada de la puerta, los cuales dijeron el uno al otro: ¿Para qué nos estamos aquí hasta que muramos?
-
4
|2 Reis 7:4|
Si tratáremos de entrar en la ciudad, por el hambre que hay en la ciudad moriremos en ella; y si nos quedamos aquí, también moriremos. Vamos pues ahora, y pasémonos al ejército de los Siros: si ellos nos dieren la vida, viviremos; y si nos dieren la muerte, moriremos.
-
5
|2 Reis 7:5|
Levantáronse pues en el principio de la noche, para irse al campo de los Siros; y llegando á las primeras estancias de los Siros, no había allí hombre.
-
6
|2 Reis 7:6|
Porque el Señor había hecho que en el campo de los Siros se oyese estruendo de carros, ruido de caballos, y estrépito de grande ejército; y dijéronse los unos á los otros: He aquí el rey de Israel ha pagado contra nosotros á los reyes de los Heteos, y á los reyes de los Egipcios, para que vengan contra nosotros.
-
-
Sugestões
Clique para ler Joel 1-3
19 de setembro LAB 628
SINAIS DA VOLTA DE JESUS
Joel
“Diante dele tremerá a terra, abalar-se-ão os céus; o sol e a lua se enegrecerão, e as estrelas retirarão o seu resplendor (Joel 2:10 - RA)”.
O que será abalado?
O que se enegrecerão?
O que acontecerá com as estrelas?
O livro de Joel é um livro cheio de detalhes proféticos, que levantam-nos alguns questionamentos. Nesse caso, a leitura de bons livros de apoio à leitura bíblica é de grande valia. Estou lendo o livro de Leandro Bertoldo, “Profecias Sobre o Tempo do Fim”, da Litteris Editora. O livro de Leandro Bertoldo tem como premissa básica as profecias bíblicas dos fatos que ocorrerão no tempo do fim do mundo.
Ao contextualizar a segunda vinda de Cristo, Bertoldo estuda tanto os sinais da volta de Jesus que antecedem o evento, quanto os sinais iminentes ou simultâneos ao próprio evento. E é aí que entra o livro de Joel. Ao ler Joel, é preciso reconhecer essa diferença. Por exemplo, em 2:28-31, a alusão é a sinais da volta de Jesus acontecendo no tempo em que antecede tal episódio. Mas no verso 10, a referência está mais próxima do acontecimento.
Joel profetizou que diante do Senhor, na Sua vinda, a Terra tremerá. Esse tremor é provocado pelo “grande terremoto, como nunca tinha bavido desde que há homens sobre a terra: tal foi este tao grande terremoto (Apocalipse 16:18 – RA)”.
Devido ao tremor da Terra, os céus serão abalados. O movimento aparente do Sol, da Lua e das estrelas parecerá aos olhos dos habitantes do mundo como ocorrendo fora do seu percurso natual. Tal fenômeno físico será observado devido ao efeito do “grande terremoto”, o qual provocará um deslocamento ou apalo mo movimento de rotação e translação da Terra.
O profeta Joel também anunciou que diante do Senhor da glória, o Sol, a Lua e as estrelas não emitirão sua luz. Esses astros estarão no céu, mas totalmente escuros. Isso foi o que o profeta Isaías anunciou: “Porque as estrelas dos céus e os astros não deixarão brilhar a sua luz; o sol se escurecerá ao nascer, e a lua não fará resplandecer a sua luz (Isaías 13:10)”.
Quando o Senhor aparecer nas alturas do céu, a única luz que os homens verão será aquela que emana da glória de Jesus. Essa glória será tão intensa que chegará a iluminar todo o globo terrestre (Salmo 97:4).
Concluindo o assunto, notemos: “Diante do fato de que os sinais deixados por Deus estão sucedendo um após outro em nossos dias, devemos tomar a decisão otimista de preparar-nos para aquele grande dia, para sermos dignos de encontrar o Senhor nas alturas do céu”.
Valdeci Júnior
Fátima Silva