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Reina Valera (1960) -
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10
|Daniel 2:10|
Los caldeos respondieron delante del rey, y dijeron: No hay hombre sobre la tierra que pueda declarar el asunto del rey; además de esto, ningún rey, prÃncipe ni señor preguntó cosa semejante a ningún mago ni astrólogo ni caldeo.
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11
|Daniel 2:11|
Porque el asunto que el rey demanda es difÃcil, y no hay quien lo pueda declarar al rey, salvo los dioses cuya morada no es con la carne.
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12
|Daniel 2:12|
Por esto el rey con ira y con gran enojo mandó que matasen a todos los sabios de Babilonia.
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|Daniel 2:13|
Y se publicó el edicto de que los sabios fueran llevados a la muerte; y buscaron a Daniel y a sus compañeros para matarlos.
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|Daniel 2:14|
Entonces Daniel habló sabia y prudentemente a Arioc, capitán de la guardia del rey, que habÃa salido para matar a los sabios de Babilonia.
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|Daniel 2:15|
Habló y dijo a Arioc capitán del rey: ¿Cuál es la causa de que este edicto se publique de parte del rey tan apresuradamente? Entonces Arioc hizo saber a Daniel lo que habÃa.
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|Daniel 2:16|
Y Daniel entró y pidió al rey que le diese tiempo, y que él mostrarÃa la interpretación al rey.
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|Daniel 2:17|
Luego se fue Daniel a su casa e hizo saber lo que habÃa a AnanÃas, Misael y AzarÃas, sus compañeros,
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|Daniel 2:18|
para que pidiesen misericordias del Dios del cielo sobre este misterio, a fin de que Daniel y sus compañeros no pereciesen con los otros sabios de Babilonia.
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19
|Daniel 2:19|
Entonces el secreto fue revelado a Daniel en visión de noche, por lo cual bendijo Daniel al Dios del cielo.
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