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Biblia de Jerusalén (1976) -
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1
|Cantares 3:1|
En mi lecho, por las noches, he buscado al amor de mi alma. Busquéle y no le hallé.
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|Cantares 3:2|
Me levantaré, pues, y recorreré la ciudad. Por las calles y las plazas buscaré al amor de mi alma. Busquéle y no le hallé.
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3
|Cantares 3:3|
Los centinelas me encontraron, los que hacen la ronda en la ciudad: «¿Habéis visto al amor de mi alma?»
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4
|Cantares 3:4|
Apenas habíalos pasado, cuando encontré al amor de mi alma. Le aprehendí y no le soltaré hasta que le haya introducido en la casa de mi madre, en la alcoba de la que me concibió.
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5
|Cantares 3:5|
Yo os conjuro, hijas de Jerusalén, por las gacelas, por las ciervas del campo, no despertéis, no desveléis al amor, hasta que le plazca.
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6
|Cantares 3:6|
¿Qué es eso que sube del desierto, cual columna de humo sahumado de mirra y de incienso, de todo polvo de aromas exóticos?
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7
|Cantares 3:7|
Ved la litera de Salomón. Sesenta valientes en torno a ella, la flor de los valientes de Israel:
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8
|Cantares 3:8|
todos diestros en la espada, veteranos en la guerra. Cada uno lleva su espada al cinto, por las alarmas de la noche.
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9
|Cantares 3:9|
El rey Salomón se ha hecho un palanquín de madera del Líbano.
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10
|Cantares 3:10|
Ha hecho de plata sus columnas, de oro su respaldo, de púrpura su asiento; su interior, tapizado de amor por las hijas de Jerusalén.
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Sugerencias
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