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Leer por capítulos:
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Biblia de Jerusalén (1976) -
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31
|Job 31:31|
¿No decían las gentes de mi tienda: «¿Hay alguien que no se haya hartado con su carne?»
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32
|Job 31:32|
El forastero no pernoctaba a la intemperie, tenía abierta mi puerta al caminante.
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33
|Job 31:33|
¿He disimulado mis culpas a los hombres, ocultando en mi seno mi pecado,
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34
|Job 31:34|
porque temiera el rumor público, o el desprecio de las gentes me asustara, hasta quedar callado sin atreverme a salir mi puerta?
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35
|Job 31:35|
¡Oh! ¿quién hará que se me escuche? Esta es mi última palabra: ¡respóndame Sadday! El libelo que haya escrito mi adversario
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36
|Job 31:36|
pienso llevarlo sobre mis espaldas, ceñírmelo igual que una diadema.
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37
|Job 31:37|
Del número de mis pasos voy a rendirle cuentas, como un príncipe me llegaré hasta él.
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38
|Job 31:38|
Si mi tierra grita contra mí, y sus surcos lloran con ella,
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39
|Job 31:39|
si he comido sus frutos sin pagarlos y he hecho expirar a sus dueños,
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40
|Job 31:40|
¡en vez de trigo broten en ella espinas, y en lugar de cebada hierba hedionda! Fin de las palabras de Job.
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Sugerencias
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