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Biblia de Jerusalén (1976) -
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31
|1 Corintios 11:31|
Si nos juzgásemos a nosotros mismos, no seríamos castigados.
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32
|1 Corintios 11:32|
Mas, al ser castigados, somos corregidos por el Señor, para que no seamos condenados con el mundo.
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33
|1 Corintios 11:33|
Así pues, hermanos míos, cuando os reunáis para la Cena, esperaos los unos a los otros.
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34
|1 Corintios 11:34|
Si alguno tiene hambre, que coma en su casa, a fin de que no os reunáis para castigo vuestro. Lo demás lo dispondré cuando vaya.
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Sugerencias
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