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Biblia de Jerusalén (1976) -
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1
|1 Samuel 9:1|
Había un hombre de Benjamín, llamado Quis, hijo de Abiel, hijo de Seror, hijo de Bekorat, hijo de Afiaj. Era un benjaminita y hombre bien situado.
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2
|1 Samuel 9:2|
Tenía un hijo llamado Saúl, joven aventajado y apuesto. Nadie entre los israelitas le superaba en gallardía; de los hombros arriba aventajaba a todos.
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3
|1 Samuel 9:3|
Se habían extraviado unas asnas pertenecientes a su padre Quis. Dijo Quis a su hijo Saúl: «Toma contigo uno de los criados y vete a buscar las asnas.»
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4
|1 Samuel 9:4|
Atravesaron la montaña de Efraím y cruzaron el territorio de Salisá sin encontrar nada; cruzaron el país de Saalim, pero no estaban allí, atravesaron el país de Benjamín sin encontrar nada.
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7
|1 Samuel 9:7|
Saúl dijo a su criado: «Vamos a ir, pero ¿qué ofreceremos a ese hombre? No queda pan en nuestros zurrones y no tenemos ningún regalo que llevar al hombre de Dios. ¿Qué le podemos dar?»
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8
|1 Samuel 9:8|
Replicó el criado y dijo a Saúl: «Es el caso que tengo en mi poder un cuarto de siclo de plata; se lo daré al hombre de Dios y nos orientará sobre nuestro viaje.»
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9
|1 Samuel 9:9|
Antes, en Israel, cuando alguien iba a consultar a Dios, decía: «Vayamos al vidente,» porque en vez de «profeta» como hoy, antes se decía «vidente».
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10
|1 Samuel 9:10|
Saúl dijo a su criado: «Tienes razón; vamos, pues.» Y se fueron a la ciudad donde se encontraba el hombre de Dios.
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11
|1 Samuel 9:11|
Cuando subían por la cuesta de la ciudad, encontraron a unas muchachas que salían a sacar agua y les preguntaron: «¿Está aquí el vidente?»
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12
|1 Samuel 9:12|
Ellas les respondieron con estas palabras: «Sí, ahí delante está el vidente. Cabalmente acaba de llegar ahora a la ciudad, porque hay hoy un sacrificio por el pueblo en el alto.
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