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Biblia de Jerusalén (1976)
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1
|Lamentaciones 2:1|
= Alef. = ¡Cómo, ay, ha anublado, en su cólera, el Señor a la hija de Sión! ¡Del cielo a la tierra ha precipitado el esplendor de Israel, sin acordarse del estrado de sus pies, en el día de su cólera!
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2
|Lamentaciones 2:2|
= Bet. = El Señor ha destruido sin piedad todas las moradas de Jacob; ha derruido, en su furor, las fortalezas de la hija de Judá; por tierra ha echado, ha profanado al reino y a sus príncipes.
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3
|Lamentaciones 2:3|
= Guímel. = en El ardor de su cólera ha quebrado todo El vigor de Israel; ha echado atrás su diestra de frente al enemigo; ha prendido en Jacob como fuego llameante que devora a la redonda.
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4
|Lamentaciones 2:4|
= Dálet. = Ha tensado su arco, igual que un enemigo, ha afirmado su diestra; como un adversario ha matado a todos los que eran encanto de los ojos; en la tienda de la hija de Sión ha vertido su furor como fuego.
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5
|Lamentaciones 2:5|
= He. = Se ha portado el Señor como enemigo; ha destruido a Israel, ha destruido todos sus palacios, ha derruido sus fortalezas, ha acumulado en la hija de Judá gemidos y gemidos.
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6
|Lamentaciones 2:6|
= Vau. = Ha forzado, como a un huerto, su cerca, ha derruido su lugar de reunión. Ha hecho olvidar Yahveh en Sión solemnidades y sábados; ha desechado en el ardor de su cólera a rey y sacerdote.
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7
|Lamentaciones 2:7|
= Zain. = El Señor ha rechazado su altar, su santuario ha desdeñado; ha dejado a merced del enemigo los muros de sus palacios; ¡gritos se dieron en la Casa de Yahveh, como en día solemne!
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8
|Lamentaciones 2:8|
= Jet. = Yahveh decidió destruir la muralla de la hija de Sión. Tiró el cordel, y no retrajo su mano de arrasar; ha envuelto en luto antemural y muro, que a la vez se desmoronan.
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9
|Lamentaciones 2:9|
= Tet. = Sus puertas en tierra se han hundido, él ha deshecho y roto sus cerrojos; su rey y sus príncipes están entre las gentes; ¡ya no hay Ley! Y tampoco sus profetas logran visiones de Yahveh.
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10
|Lamentaciones 2:10|
= Yod. = En tierra están sentados, en silencio, los ancianos de la hija de Sión; se han echado polvo en su cabeza, se han ceñido de sayal. Inclinan su cabeza hasta la tierra las vírgenes de Jerusalén.
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Sugerencias
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