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									 Biblia de Jerusalén (1976) Biblia de Jerusalén (1976)
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									11
									 
									 
									|Malaquías 3:11|
									y no ahuyento de vosotros al devorador, para que no os destruya el fruto del suelo y no se os quede estéril la viña en el campo, dice Yahveh Sebaot.									
     
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									12
									 
									 
									|Malaquías 3:12|
									Todas las naciones os felicitarán entonces, porque seréis una tierra de delicias, dice Yahveh Sebaot.									
     
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									13
									 
									 
									|Malaquías 3:13|
									Duras me resultan vuestras palabras, dice Yahveh. - Y todavía decís: ¿Qué hemos dicho contra ti? -									
     
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									14
									 
									 
									|Malaquías 3:14|
									Habéis dicho: Cosa vana es servir a Dios; ¿qué ganamos con guardar su mandamiento o con andar en duelo ante Yahveh Sebaot?									
     
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									15
									 
									 
									|Malaquías 3:15|
									Más bien, llamamos felices a los arrogantes: aun haciendo el mal prosperan, y aun tentando a Dios escapan libres.									
     
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									16
									 
									 
									|Malaquías 3:16|
									Entonces los que temen a Yahveh se hablaron unos a otros. Y puso atención Yahveh y oyó; y se escribió ante él un libro memorial en favor de los que temen a Yahveh y piensan en su Nombre.									
     
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									17
									 
									 
									|Malaquías 3:17|
									Serán ellos para mí, dice Yahveh Sebaot, en el día que yo preparo, propiedad personal; y yo seré indulgente con ellos como es indulgente un padre con el hijo que le sirve.									
     
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									18
									 
									 
									|Malaquías 3:18|
									Entonces vosotros volveréis a distinguir entre el justo y el impío, entre quien sirve a Dios y quien no le sirve.									
     
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									19
									 
									 
									|Malaquías 3:19|
									Pues he aquí que viene el Día, abrasador como un horno; todos los arrogantes y los que cometen impiedad serán como paja; y los consumirá el Día que viene, dice Yahveh Sebaot, hasta no dejarles raíz ni rama.									
     
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									20
									 
									 
									|Malaquías 3:20|
									Pero para vosotros, los que teméis mi Nombre, brillará el sol de justicia con la salud en sus rayos, y saldréis brincando como becerros bien cebados fuera del establo.									
     
 
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