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Biblia de Jerusalén (1976) -
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11
|Tito 1:11|
a quienes es menester tapar la boca; hombres que trastornan familias enteras, enseñando por torpe ganancia lo que no deben.
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12
|Tito 1:12|
Uno de ellos, profeta suyo, dijo: «Los cretenses son siempre mentirosos, malas bestias, vientres perezosos.»
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13
|Tito 1:13|
Este testimonio es verdadero. Por tanto repréndeles severamente, a fin de que conserven sana la fe,
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14
|Tito 1:14|
y no den oídos a fábulas judaicas, ni a mandamientos de hombres que se apartan de la verdad.
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15
|Tito 1:15|
Para los limpios todo es limpio; mas para los contaminados e incrédulos nada hay limpio, pues su mente y conciencia están contaminadas.
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16
|Tito 1:16|
Profesan conocer a Dios, mas con sus obras le niegan; son abominables y rebeldes e incapaces de toda obra buena.
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1
|Tito 2:1|
Mas tú enseña lo que es conforme a la sana doctrina;
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2
|Tito 2:2|
que los ancianos sean sobrios, dignos, sensatos, sanos en la fe, en la caridad, en la paciencia, en el sufrimiento;
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3
|Tito 2:3|
que las ancianas asimismo sean en su porte cual conviene a los santos: no calumniadoras ni esclavas de mucho vino, maestras del bien,
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4
|Tito 2:4|
para que enseñen a las jóvenes a ser amantes de sus maridos y de sus hijos,
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Sugerencias
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