-
-
Biblia de Jerusalén (1976) -
-
7
|Daniel 3:7|
Con tal motivo, en cuanto se oyó sonar el cuerno, el pífano, la cítara, la sambuca, el salterio, la zampoña y toda clase de música, todos los pueblos, naciones y lenguas se postraron y adoraron la estatua de oro que había erigido el rey Nabucodonosor.
-
-
Sugerencias

Haga clic para leer Juan 7-8