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 Leer por capítulos:
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									 Biblia de Jerusalén (1976) Biblia de Jerusalén (1976)
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									1
									 
									 
									|Deuteronomio 18:1|
									Los sacerdotes levitas, toda la tribu de Leví, no tendrán parte ni heredad con Israel: vivirán de los manjares ofrecidos a Yahveh y de su heredad.									
     
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									2
									 
									 
									|Deuteronomio 18:2|
									Esta tribu no tendrá heredad entre sus hermanos; Yahveh será su heredad, como él le ha dicho.									
     
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									3
									 
									 
									|Deuteronomio 18:3|
									Este será el derecho de los sacerdotes sobre aquellos que ofrezcan un sacrificio de ganado mayor o menor: se dará al sacerdote la espaldilla, las quijadas y el cuajar.									
     
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									4
									 
									 
									|Deuteronomio 18:4|
									Le darás las primicias de tu trigo, de tu mosto y de tu aceite, así como las primicias del esquileo de tu ganado menor.									
     
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									5
									 
									 
									|Deuteronomio 18:5|
									Porque a él le ha elegido Yahveh tu Dios entre todas las tribus para ejercer su ministerio en el nombre de Yahveh él y sus hijos para siempre.									
     
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									6
									 
									 
									|Deuteronomio 18:6|
									Si el levita llega de una de tus ciudades de todo Israel donde reside, y entra por deseo propio en el lugar elegido por Yahveh,									
     
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									7
									 
									 
									|Deuteronomio 18:7|
									oficiará en el nombre de Yahveh su Dios, como todos sus hermanos levitas que se encuentran allí en presencia de Yahveh;									
     
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									8
									 
									 
									|Deuteronomio 18:8|
									comerá una porción igual a la de ellos, aparte lo que obtenga por la venta de sus bienes patrimoniales.									
     
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									9
									 
									 
									|Deuteronomio 18:9|
									Cuando hayas entrado en la tierra que Yahveh tu Dios te da, no aprenderás a cometer abominaciones como las de esas naciones.									
     
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									10
									 
									 
									|Deuteronomio 18:10|
									No ha de haber en ti nadie que haga pasar a su hijo o a su hija por el fuego, que practique adivinación, astrología, hechicería o magia,									
     
 
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