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									 Biblia de Jerusalén (1976) Biblia de Jerusalén (1976)
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									21
									 
									 
									|Ester 1:21|
									Pareció bueno el consejo al rey y a los jefes, y el rey llevó a efecto la palabra de Memukán.									
     
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									22
									 
									 
									|Ester 1:22|
									Envió el rey cartas a todas las provincias, a cada provincia según su escritura, y a cada pueblo según su lengua, para que todo marido fuese señor de su casa.									
     
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									1
									 
									 
									|Ester 2:1|
									Después de estos sucesos se aplacó la cólera del rey Asuero y se acordó de Vastí, de cuanto había hecho, y de lo que acerca de ella se había decidido.									
     
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									2
									 
									 
									|Ester 2:2|
									Dijeron los cortesanos que estaban al servicio del rey: «Que se busquen para el rey jóvenes vírgenes y bellas.									
     
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									3
									 
									 
									|Ester 2:3|
									Nombre el rey inspectores en todas las provincias de su reino para que reúnan en la ciudadela de Susa, en el harén, a todas las jóvenes vírgenes y bellas, bajo la vigilancia de Hegué, eunuco del rey, encargado de las mujeres, y que él les dé cuanto necesiten para su adorno,									
     
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									4
									 
									 
									|Ester 2:4|
									y la joven que agrade al rey, reinará en lugar de Vastí.» Le pareció bien al rey y así se hizo.									
     
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									5
									 
									 
									|Ester 2:5|
									Había en la ciudadela de Susa un judío, llamado Mardoqueo, hijo de Yaír, hijo de Semeí, hijo de Quis, de la tribu de Benjamín.									
     
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									6
									 
									 
									|Ester 2:6|
									Había sido deportado de Jerusalén con Jeconías, rey de Judá, en la deportación que hizo Nabucodonosor, el rey de Babilonia.									
     
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									7
									 
									 
									|Ester 2:7|
									Tenía en su casa a Hadassá, es decir, Ester, hija de un tío suyo, pues era huérfana de padre y madre. La joven era hermosa y de buen parecer, y al morir su padre y su madre, Mardoqueo la adoptó por hija.									
     
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									8
									 
									 
									|Ester 2:8|
									Cuando se proclamó la orden y el edicto del rey, fueron reunidas muchísimas jóvenes en la ciudadela de Susa, bajo la vigilancia de Hegué; también Ester fue llevada al palacio real y puesta bajo la vigilancia de Hegué, encargado de las mujeres.									
     
 
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