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Biblia de Jerusalén (1976)
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53
|Lucas 9:53|
pero no le recibieron porque tenía intención de ir a Jerusalén.
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|Lucas 9:54|
Al verlo sus discípulos Santiago y Juan, dijeron: «Señor, ¿quieres que digamos que baje fuego del cielo y los consuma?»
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|Lucas 9:55|
Pero volviéndose, les reprendió;
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56
|Lucas 9:56|
y se fueron a otro pueblo.
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57
|Lucas 9:57|
Mientras iban caminando, uno le dijo: «Te seguiré adondequiera que vayas.»
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58
|Lucas 9:58|
Jesús le dijo: «Las zorras tienen guaridas, y las aves del cielo nidos; pero el Hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza.»
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59
|Lucas 9:59|
A otro dijo: «Sígueme.» El respondió: «Déjame ir primero a enterrar a mi padre.»
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60
|Lucas 9:60|
Le respondió: «Deja que los muertos entierren a sus muertos; tú vete a anunciar el Reino de Dios.»
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61
|Lucas 9:61|
También otro le dijo: «Te seguiré, Señor; pero déjame antes despedirme de los de mi casa.»
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62
|Lucas 9:62|
Le dijo Jesús: «Nadie que pone la mano en el arado y mira hacia atrás es apto para el Reino de Dios.»
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Sugerencias
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