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 Leer por capítulos:
 42- 
									 Biblia de Jerusalén (1976) Biblia de Jerusalén (1976)
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									1
									 
									 
									|Salmos 42:1|
									Como jadea la cierva, tras las corrientes de agua, así jadea mi alma, en pos de ti, mi Dios.									
     
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									2
									 
									 
									|Salmos 42:2|
									Tiene mi alma sed de Dios, del Dios vivo; ¿cuándo podré ir a ver la faz de Dios?									
     
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									3
									 
									 
									|Salmos 42:3|
									¡Son mis lágrimas mi pan, de día y de noche, mientras me dicen todo el día: ¿En dónde está tu Dios?									
     
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									4
									 
									 
									|Salmos 42:4|
									Yo lo recuerdo, y derramo dentro de mí mi alma, cómo marchaba a la Tienda admirable, a la Casa de Dios, entre los gritos de júbilo y de loa, y el gentío festivo.									
     
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									5
									 
									 
									|Salmos 42:5|
									¿Por qué, alma mía, desfalleces y te agitas por mí? Espera en Dios: aún le alabaré, ¡salvación de mi rostro y									
     
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									6
									 
									 
									|Salmos 42:6|
									mi Dios! En mí mi alma desfallece. por eso te recuerdo desde la tierra del Jordán y los Hermones, a ti, montaña humilde.									
     
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									7
									 
									 
									|Salmos 42:7|
									Abismo que llama al abismo, en el fragor de tus cataratas, todas tus olas y tus crestas han pasado sobre mí.									
     
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									8
									 
									 
									|Salmos 42:8|
									De día mandará Yahveh su gracia, y el canto que me inspire por la noche será una oración al Dios de mi vida.									
     
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									9
									 
									 
									|Salmos 42:9|
									Diré a Dios mi Roca: ¿Por qué me olvidas?, ¿por qué he de andar sombrío por la opresión del enemigo?									
     
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									10
									 
									 
									|Salmos 42:10|
									Con quebranto en mis huesos mis adversarios me insultan, todo el día repitiéndome: ¿En dónde está tu Dios?									
     
 
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