- 
			
				- 
									 Biblia de Jerusalén (1976) Biblia de Jerusalén (1976)
- 
									  
 - 
									
									11
									 
									 
									|2 Corintios 5:11|
									Por tanto, conociendo el temor del Señor, tratamos de persuadir a los hombres, pues ante Dios estamos al descubierto, como espero que ante vuestras conciencias también estemos al descubierto.									
     
 - 
									
									12
									 
									 
									|2 Corintios 5:12|
									No volvemos a recomendarnos ante vosotros; solamente queremos daros ocasión para gloriaros de nosotros y así tengáis cómo responder a los que se glorían de lo exterior, y no de lo que está en el corazón.									
     
 - 
									
									13
									 
									 
									|2 Corintios 5:13|
									En efecto, si hemos perdido el juicio, ha sido por Dios; y si somos sensatos, lo es por vosotros.									
     
 - 
									
									14
									 
									 
									|2 Corintios 5:14|
									Porque el amor de Cristo nos apremia al pensar que, si uno murió por todos, todos por tanto murieron.									
     
 - 
									
									15
									 
									 
									|2 Corintios 5:15|
									Y murió por todos, para que ya no vivan para sí los que viven, sino para aquel que murió y resucitó por ellos.									
     
 - 
									
									16
									 
									 
									|2 Corintios 5:16|
									Así que, en adelante, ya no conocemos a nadie según la carne. Y si conocimos a Cristo según la carne, ya no le conocemos así.									
     
 - 
									
									17
									 
									 
									|2 Corintios 5:17|
									Por tanto, el que está en Cristo, es una nueva creación; pasó lo viejo, todo es nuevo.									
     
 - 
									
									18
									 
									 
									|2 Corintios 5:18|
									Y todo proviene de Dios, que nos reconcilió consigo por Cristo y nos confió el ministerio de la reconciliación.									
     
 - 
									
									19
									 
									 
									|2 Corintios 5:19|
									Porque en Cristo estaba Dios reconciliando al mundo consigo, no tomando en cuenta las transgresiones de los hombres, sino poniendo en nosotros la palabra de la reconciliación.									
     
 - 
									
									20
									 
									 
									|2 Corintios 5:20|
									Somos, pues, embajadores de Cristo, como si Dios exhortara por medio de nosotros. En nombre de Cristo os suplicamos: ¡reconciliaos con Dios!									
     
 
- 
									
- 
				- Sugerencias 
 

Haga clic para leer Juan 7-8