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									 Biblia de Jerusalén (1976) Biblia de Jerusalén (1976)
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									1
									 
									 
									|Hebreos 9:1|
									También la primera Alianza tenía sus ritos litúrgicos y su santuario terreno.									
     
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									2
									 
									 
									|Hebreos 9:2|
									Porque se preparó la parte anterior de la Tienda, donde se hallaban el candelabro y la mesa con los panes de la presencia, que se llama Santo.									
     
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									3
									 
									 
									|Hebreos 9:3|
									Detrás del segundo velo se hallaba la parte de la Tienda llamada Santo de los Santos,									
     
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									4
									 
									 
									|Hebreos 9:4|
									que contenía el altar de oro para el incienso, el arca de la Alianza - completamente cubierta de oro - y en ella, la urna de oro con el maná, la vara de Aarón que retoño y las tablas de la Alianza.									
     
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									5
									 
									 
									|Hebreos 9:5|
									Encima del arca, los querubines de gloria que cubrían con su sombra el propiciatorio. Mas no es éste el momento de hablar de todo ello en detalle.									
     
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									6
									 
									 
									|Hebreos 9:6|
									Preparadas así estas cosas, los sacerdotes entran siempre en la primera parte de la Tienda para desempeñar las funciones del culto.									
     
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									7
									 
									 
									|Hebreos 9:7|
									Pero en la segunda parte entra una vez al año, y solo, el Sumo Sacerdote, y no sin sangre que ofrecer por sí mismo y por los pecados del pueblo.									
     
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									8
									 
									 
									|Hebreos 9:8|
									De esa manera daba a entender el Espíritu Santo que aún no estaba abierto el camino del santuario mientras subsistiera la primera Tienda.									
     
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									9
									 
									 
									|Hebreos 9:9|
									Todo ello es una figura del tiempo presente, en cuanto que allí se ofrecen dones y sacrificios incapaces de perfeccionar en su conciencia al adorador,									
     
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									10
									 
									 
									|Hebreos 9:10|
									y sólo son prescripciones carnales, que versan sobre comidas y bebidas y sobre abluciones de todo género, impuestas hasta el tiempo de la reforma.									
     
 
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				- Sugerencias 
 

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